La necesidad de continuar con este hermoso proyecto que acompaña mi vida llamado “La Celda De Bob” ha sido una lucha de una década desde la más absoluta autogestión. Fácil no ha sido, pero es lo que me apasiona y aquí sigo. Nunca me he ido, por eso nunca he regresado, sin embargo, tengo la necesidad de llevar todo esto que se ha hecho a un siguiente nivel, salir del clóset del underground precario y devolver la confianza y fidelidad que me ha brindado la escena latinoamericana con una plataforma que esté a la altura de las principales webzines del globo, pero con contenido en nuestro idioma, bajo nuestros códigos, tratando nuestras problemáticas. Tengo un sinfín de ideas y ganas de concretarlas, pero me hice adulto a la par que me hice un profesional de las comunicaciones en el Hip Hop, y esto lo digo con orgullo, sin disfrazarlo en una falsa modestia, aunque ese profesionalismo y compromiso con el que quise hacer de esto mi trabajo no es algo rentable, menos si eres padre, menos si debes afrontar los problemas a los que se enfrenta cualquier padre que quiere legar ideales y consecuencia más que el exitismo que se camufla con la cochina plata. Necesito de su ayuda, porque quiero hacer esto con las mismas ganas y entusiasmo que inicié esta aventura de documentar y aportar puntos de vistas hace varios años, y ahora con más compromiso todavía, porque hemos madurado con el Hip Hop, y entiendo que no basta con ser una vitrina de artistas bajo el formato de la escena de los años 2000, cuando los raperos de hoy son pares adultos aportando experiencias reales y no gente que simplemente necesita un lugar donde mostrarse. Por lo tanto, mi proyecto no es sólo cambiarle la cara a la web, sino una reestructuración completa de su formato, un formato que permita ser ese diario virtual rapero con contenidos siempre actualizados, columnas de opinión, incorporando ojalá más perspectivas que las mías, pero siempre cuidando y manteniendo la línea editorial que le ha brindado su prestigio o reconocimiento en el circuito. Y para esto, y gracias al increíble y esperanzador apoyo que recibí de esta preciosa escena, estoy impulsando una modalidad colectiva de financiamiento en el que todos salimos beneficiados en cierta forma. Se llama “La rifa de Bob”, y consiste en ofrecer grandes y variados premios a un precio módico, con intenciones claras de que esto pueda proyectarse a futuro como una ventana de promoción para quienes estén emprendiendo sus servicios, sean diseñadores, audiovisuales, estudios de grabación, productores, fotógrafos, y un largo etcétera de posibilidades de los que somos los artesanos que alimentamos esta cultura. Más abajo podrán encontrar varios de los premios que están en juego. Son tantos, que prácticamente quien participe ganará algo. Mientras ustedes ganan, a mí me permite asegurarme una base económica que me de el tiempo de trabajar y avanzar en esto sin necesidad de abandonarlo. Y quienes aportan premios, la opción de promocionarse y desde luego contar con el apañe de www.laceldadebob.cl para lo que necesiten.

“La rifa de Bob” estará abierta y disponible hasta el próximo 30 de junio. Hasta entonces, estaré recibiendo aportes de nuevos premios y el dinero de los números comprados en mi cuenta rut (los detalles los comparto más adelante). Cada número tiene un valor de $3.000 (2 x $5.000). Quienes hagan el depósito, deberán enviarme un comprobante de transferencia al correo larifa@laceldadebob.cl juntos con sus datos (nombre completo, teléfono) y la lista escogida, y yo les responderé para confirmarles cuáles serán sus números, ya que no se pueden escoger, pues serán asignados por orden de llegada. La rifa consta de cuatro listas según la categoría de los premios.

Reitero, los números no se pueden escoger, se irán asignado por orden de llegada. Asegúrate de revisar cuál es la lista que más te sirve o interesa cuando mires la inmensa oferta de premios que tenemos gracias al auspicio de todas y todos los que han aportado su granito de arena.

Los datos para el depósito son: