La otra noche me habla por el chat L’Sig y me dice: “Ya Patiño,
suelta no más el disco… estoy en el avión y ya voy a despegar”. Si bien ese
acuerdo lo habíamos definido varios meses atrás, no entendía el porqué de aquel
impulso tan repentino, si ni siquiera había recibido las gráficas de la
cubierta de Infinito –nombre de su nueva entrega—, cómo pretendía entonces
que se lo estrenase “así soltándolo no más”; pero así es José Salazar: un descuidado que no se interesa en seguir ningún
tipo de protocolo o manía de esas que con los años entre todos le hemos
injertado forzosamente al rap. Y pensándolo bien, esa visión simplista tiene bastante
lógica después de todo, ya que nos devuelve a lo espontáneo de lo primitivo, aunque
claro, hay otra verdad, no podía tampoco disimular la ansiedad por compartir su
primera obra. Era la noche en que abandonaba Chile persiguiendo nuevos
proyectos personales con Nueva Zelanda como destino y punto de partida, he ahí
la respuesta a su prisa por el desprendimiento en dejar atrás un episodio y
abrir un siguiente capítulo, así que retomando la intención primara le pedí que
nos aguantáramos algunos días más antes
de soltarlo, al menos hasta tener una imagen para su presentación, pues no
había apuro ni mucho menos presión. Claro que L’Sig no es de los que prefieran rellenar párrafos en entrevistas u
otro tipo de artículos similares, que es a lo que yo me dedico, así que para
cumplir el acuerdo también hay que buscarle el equilibrio al asunto.
suelta no más el disco… estoy en el avión y ya voy a despegar”. Si bien ese
acuerdo lo habíamos definido varios meses atrás, no entendía el porqué de aquel
impulso tan repentino, si ni siquiera había recibido las gráficas de la
cubierta de Infinito –nombre de su nueva entrega—, cómo pretendía entonces
que se lo estrenase “así soltándolo no más”; pero así es José Salazar: un descuidado que no se interesa en seguir ningún
tipo de protocolo o manía de esas que con los años entre todos le hemos
injertado forzosamente al rap. Y pensándolo bien, esa visión simplista tiene bastante
lógica después de todo, ya que nos devuelve a lo espontáneo de lo primitivo, aunque
claro, hay otra verdad, no podía tampoco disimular la ansiedad por compartir su
primera obra. Era la noche en que abandonaba Chile persiguiendo nuevos
proyectos personales con Nueva Zelanda como destino y punto de partida, he ahí
la respuesta a su prisa por el desprendimiento en dejar atrás un episodio y
abrir un siguiente capítulo, así que retomando la intención primara le pedí que
nos aguantáramos algunos días más antes
de soltarlo, al menos hasta tener una imagen para su presentación, pues no
había apuro ni mucho menos presión. Claro que L’Sig no es de los que prefieran rellenar párrafos en entrevistas u
otro tipo de artículos similares, que es a lo que yo me dedico, así que para
cumplir el acuerdo también hay que buscarle el equilibrio al asunto.
Por
Güissario Patiño / Fotografias de Damaris Sedini.
Güissario Patiño / Fotografias de Damaris Sedini.
Indudablemente quedó una espina clavada luego de que el
trío Nomasterrikolaz decidiera disolverse
poco después de lanzar su primera publicación Vapor Puro Morbo (2012). De
más está decir que L’Sig no es
ningún iniciado en la escuela del rap nacional, pero tenía pendiente consigo
mismo la edición de un trabajo al que llamarle propio y libre, desarrollado a
su ritmo y criterio, pues a pesar de que la experiencia en las tablas y el
respeto entre sus pares fueron rentas de las que se adueñó en los tiempos en
que no eran precisamente esas la metas, sino el camino en sí, no había ninguna
referencia a la que hacer mención a la hora de hablar sobre su trabajo. Infinito
vino a saldar esa deuda con un aval de catorce cortes originales, aunque no
está mal señalar que pese a los años a su favor no logró salvarse de la
conducta ineludible del primer disco, esa misma que los calificados críticos
musicales citan siúticamente como “declaración de intenciones” en sus
editoriales. Un disco colmado en contenido, no digerible a la primera repasada,
sino que merece la debida atención cada una de sus barrocas líneas. L’Sig ofrece un trabajo intrínseco, de
opinión subjetiva, proclive a una refinada línea reflexiva de la que sobresalen
líricas como las de “EntreJazzyRap”, “Nadar en la arena”, “Tómalo”,
o la retórica “La vida es ahora”; pero que sufre bruscos quiebres con
creaciones más arremetidas, como el caso de “Micros, tablas represent”,
“No
lo intentes” o “MTL562”.
Son treinta y seis minutos de un itinerario variopinto, pero
que nunca deja de exponer su honesto juicio, cualquiera sea el formato o
discurso. Una convergencia en escuelas, épocas y amistades musicales, que pasa
de sentar una armonía o definición, sino que goza de la instancia creativa como
único porqué… y es que la caravana así lo exige, pues ahí es donde encontramos nombres
como los canadienses Witness (del
grupo Kit Ou Double) y Nerologic, el colombiano Genocide, La Equilibrista, Cronelnegro,
Piter, Dibujo Emci, FIVS, Dgkstarr y Heem, mientras que las instrumentales las aportan 5mentarios (España), Respect (Colombia), los nacionales Adolfo, A.R.B, Talobeez, WildHadess, HighBeatz, y algunas agradables novedades, como Felipe Armonía, Dussoner y Fassbeats.
que nunca deja de exponer su honesto juicio, cualquiera sea el formato o
discurso. Una convergencia en escuelas, épocas y amistades musicales, que pasa
de sentar una armonía o definición, sino que goza de la instancia creativa como
único porqué… y es que la caravana así lo exige, pues ahí es donde encontramos nombres
como los canadienses Witness (del
grupo Kit Ou Double) y Nerologic, el colombiano Genocide, La Equilibrista, Cronelnegro,
Piter, Dibujo Emci, FIVS, Dgkstarr y Heem, mientras que las instrumentales las aportan 5mentarios (España), Respect (Colombia), los nacionales Adolfo, A.R.B, Talobeez, WildHadess, HighBeatz, y algunas agradables novedades, como Felipe Armonía, Dussoner y Fassbeats.
Así se enchapa un punto medular en la actividad musical de José Salazar, quien
cumple con dejar un legado, pero sin esperar pertenecer o sumarse a las
parrillas nacionales. Un viaje con retorno impreciso tiene en él al rap como
único objetivo en su mira, siendo el día de hoy cuando empieza a perseguir
verdaderamente sus ambiciones, tanto en lo artístico como en lo personal… reflexiones al menos que se abren para la libre interpretación con las las líneas de Infinito.
cumple con dejar un legado, pero sin esperar pertenecer o sumarse a las
parrillas nacionales. Un viaje con retorno impreciso tiene en él al rap como
único objetivo en su mira, siendo el día de hoy cuando empieza a perseguir
verdaderamente sus ambiciones, tanto en lo artístico como en lo personal… reflexiones al menos que se abren para la libre interpretación con las las líneas de Infinito.
“Comienza un nuevo día, despierto de
noche, no es insomnio ni derroche de pose. Por el palpito a la par de un par de
cuores nació José, en la calle se apodo L’Sig, y hoy se puso a grabar un disco
por su propio goce, piropeó al ritmo con frases, por ser fiel va por el mismo
riel, lleva piel de papel dentro de el amor al arte viene el underground. So
you wanna be hardcore? Recuerdos grandes, otros olvidados ante el buen momento,
presente perenne sin pretender tener poder sobre la mente de la gente, siempre
queriendo aprender verás la veracidad del verso, ver nexos entre yo y el beat
entreno en el beat, el dojo, la street o esa instancia de dejar registro en el
estudio… hoy es tu día bro, disfrútalo.”
noche, no es insomnio ni derroche de pose. Por el palpito a la par de un par de
cuores nació José, en la calle se apodo L’Sig, y hoy se puso a grabar un disco
por su propio goce, piropeó al ritmo con frases, por ser fiel va por el mismo
riel, lleva piel de papel dentro de el amor al arte viene el underground. So
you wanna be hardcore? Recuerdos grandes, otros olvidados ante el buen momento,
presente perenne sin pretender tener poder sobre la mente de la gente, siempre
queriendo aprender verás la veracidad del verso, ver nexos entre yo y el beat
entreno en el beat, el dojo, la street o esa instancia de dejar registro en el
estudio… hoy es tu día bro, disfrútalo.”
L’SIG – INFINITO (LP 2013, ARKHAM BASYLUM/GREEN HOUZE INC)
01. Ntro
02. Tómalo
03. Micro Tablas Respresent (con Piter & DibujoMc)
04. EntreJazzyRap
05. La vida es ahora
06. Nadar en la arena
07. MTL562 (con Witness)
08. Persona, personaje
09. Crítico
10. De barrio (con Genocide & Nerologic)
11. Universal pasión (con La Equilibrista)
12. No lo intentes (con Heem & Dgkstarr)
13. DePelea (con Fivs)
14. Las raíces (con Cronelnegro)
15. Outro
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